Comentaba la escritora francesa, Françoise Sagan, que el fútbol le recordaba viejos e intensos amores, porque en ningún otro lugar como en el estadio se puede querer u odiar tanto a alguien.
Y ese amor cuando se demuestra en su plenitud es en esos partidos que la gente denomina derbis, que para quien no sepa un derbi es un encuentro entre dos equipos rivales de la misma ciudad o zona geográfica, partidos en los que para algunos solo es un partido más de la liga pero para otros muchos es más que eso, es una sensación única poder ganar a tu rival y después chulear con tus compañeros y amigos de que tu equipo ha ganado del derbi.
Recuerdo aquellos años en que el Depor jugaba contra el Celta ,y aunque los dos equipos estuviesen a punto de descender, el estadio estaba lleno, más que contra el Madrid o el Barça, y la gente estaba expectante a que comenzase el partido y sufriendo por el resultado. Ahora, ya no podemos sentir esa emoción que pasaba dos domingos al año por nuestro cuerpo.
Pero no solo en el futbol profesional sientes esa emoción, sino también en el amateur, puedes perder todos los partidos de la liga, pero ganarle a tu máximo rival, aquel equipo del pueblo de al lado, es comparable casi con ganar la liga. Una liga ganada pero sin ganar el derbi no es una liga, recordaba un gran amigo. Por eso quiero que dejéis aquí vuestras sensaciones sobre lo que para vosotros es un derbi si creéis que puede ser un partido especial o uno más, da igual si es un Depor-Celta, un Madrid-Atlético, un Barça- Espanyol o incluso un Corcubión-Cee.
